Fages, poeta maldito
JOSEP PLAYA MASET La Vanguardia (12-10-99)
Una gran ventaja de Internet es que no conoce la censura o, mejor aún, que permite desafiarla. A veces puede ser también un problema, y basta recordar el uso que los pederastas y otros enfermos pueden hacer de las páginas electrónicas.Pero hoy quiero hablar de la web que responde a las teclas de members.xoom.com/fages/ porque se ha convertido en la primera editorial clandestina catalana de la era electrónica. Primero empezó publicando el largo poema “El somni del Cap de Creus”, aún inédito, de Carles Fages de Climent (1902-1968) y ahora nos ponen en pantalla “La balada del sabater d'Ordis” y “Les bruixes de Llers”, dos libros cuyas últimas ediciones, muy difíciles de encontrar, datan de 1970 y 1977.
Ahora esta web anónima ha empezado la difusión de sus polémicos epigramas. Para los jóvenes que no han tenido acceso a estos versos, transmitidos de boca en boca, conviene decir que van desde el elogio de sus amigos a la feroz diatriba contra sus enemigos, que fueron muchos, sin dejar pasar algunas procacidades que divertían al bueno de Lo gaiter de la Muga. Como ejemplo valgan dos de los epigramas reproducidos. El primero lo dedica a Josep Pla: “Es tan senzill l'Empordà / ample, esbatanat i llis / que l'home que escriu més pla / ha pres el nom del país”. No me dirán que no sea poeticamente bello. A Joan Triadú, que le excluyó de una antología, le dirigió este otro: “Diu que en Joan Triadú / que per triar no té do / si quan tria, tria dur / és que és un mal triador”.
El objetivo de esta web no parece otro que empujar a los herederos de Fages de Climent a que divulguen su obra, la que esté inédita y la que se publicó a través de la editorial Pérgamo, que él propio poeta creó para dar a conocer sus obras.
Fages fue desde su atalaya aristocrática un “outsider” impertinente que siempre fue a contracorriente, como lo definió recientemente su hijo Pere. Pero la negativa a publicar su obra ha exagerado esta condición de poeta maldito. La difusión por Internet debería hacerles replantear esta actitud. Es necesario contar con las obras completas de Fages para poderlo juzgar en pie de igualdad con otros autores.
JOSEP PLAYA MASET La Vanguardia (12-10-99)
Una gran ventaja de Internet es que no conoce la censura o, mejor aún, que permite desafiarla. A veces puede ser también un problema, y basta recordar el uso que los pederastas y otros enfermos pueden hacer de las páginas electrónicas.Pero hoy quiero hablar de la web que responde a las teclas de members.xoom.com/fages/ porque se ha convertido en la primera editorial clandestina catalana de la era electrónica. Primero empezó publicando el largo poema “El somni del Cap de Creus”, aún inédito, de Carles Fages de Climent (1902-1968) y ahora nos ponen en pantalla “La balada del sabater d'Ordis” y “Les bruixes de Llers”, dos libros cuyas últimas ediciones, muy difíciles de encontrar, datan de 1970 y 1977.
Ahora esta web anónima ha empezado la difusión de sus polémicos epigramas. Para los jóvenes que no han tenido acceso a estos versos, transmitidos de boca en boca, conviene decir que van desde el elogio de sus amigos a la feroz diatriba contra sus enemigos, que fueron muchos, sin dejar pasar algunas procacidades que divertían al bueno de Lo gaiter de la Muga. Como ejemplo valgan dos de los epigramas reproducidos. El primero lo dedica a Josep Pla: “Es tan senzill l'Empordà / ample, esbatanat i llis / que l'home que escriu més pla / ha pres el nom del país”. No me dirán que no sea poeticamente bello. A Joan Triadú, que le excluyó de una antología, le dirigió este otro: “Diu que en Joan Triadú / que per triar no té do / si quan tria, tria dur / és que és un mal triador”.
El objetivo de esta web no parece otro que empujar a los herederos de Fages de Climent a que divulguen su obra, la que esté inédita y la que se publicó a través de la editorial Pérgamo, que él propio poeta creó para dar a conocer sus obras.
Fages fue desde su atalaya aristocrática un “outsider” impertinente que siempre fue a contracorriente, como lo definió recientemente su hijo Pere. Pero la negativa a publicar su obra ha exagerado esta condición de poeta maldito. La difusión por Internet debería hacerles replantear esta actitud. Es necesario contar con las obras completas de Fages para poderlo juzgar en pie de igualdad con otros autores.