Figueres, época dorada.
Una exposición del Museu de l'Empordà ilustra los años de esplendor que vivió la ciudad durante la República
(CARLES ARBOLI - La Vanguardia 12/12/1999)
Girona. Figueres también tuvo su época dorada. Fue entre 1900 y 1936 cuando la ciudad se transformó y vivió su apogeo cultural, económico, urbanístico y social en sintonía con lo que ocurría en la mayor parte de Cataluña. Una época de predominio republicano que se truncó con el estallido de la Guerra Civil y hundió el país en una larga dictadura militar. Significó el fin de la época más brillante de la historia contemporánea de España.
Este relato es el hilo conductor de la exposición "Figueres 1900-1936. Imatge i història de la Catalunya republicana" que desde ayer se puede visitar en el Museu de l'Empordà. El historiador Jaume Santaló se ha pasado el último año trabajando en esta muestra, que presenta y analiza la trayectoria social, económica, urbanística y cultural de Figueres durante este periodo.
Fotografías, documentos, mapas, planos, grabaciones y obras de arte componen el contenido de la exposición, que presenta algún material inédito, como una filmación de la inauguración del monumento a Narcís Monturiol en 1918. La mayor parte del material, repartido en paneles con los colores rojo, amarillo y violeta de la bandera republicana, procede de los principales archivos históricos de Cataluña y algunos particulares, además de obras de la Fundació Gala-Salvador Dalí, el Museu Nacional d'Art de Catalunya o el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.
La visita cronológica a la exposición constata según Santaló, su comisario, "el predominio incuestionable en la sociedad figuerense del republicanismo federalista y catalanista" que, junto a otros factores socioeconómicos, "convirtieron la Figueres de la época en una ciudad de gran dinamismo". Unos años durante los que bajo el mandato del alcalde Marià Pujulà y su inspirador e ideólogo republicano Josep Puig Pujades se reformó la Rambla, se construyó el Parc-Bosc y se sentaron las bases para el posterior crecimiento urbanístico. Unas actuaciones dirigidas en todo momento por el arquitecto Ricard Giralt.
Sin embargo, en 1923 ocurrió algo que paralizó momentáneamente la normalidad republicana. Fue el golpe militar de Primo de Rivera que significó una regresión en la dinámica que se inició a principios de siglo. Esta etapa coincide con un apogeo del activismo cultural para combatir la militarización de la vida política y luchar contra la censura. En 1926 se crea Foment de la Sardana y dos años más tarde nace Atenea, cuyo documento de constitución se puede ver en la exposición con las firmas, entre otros, de Salvador Dalí o Alexandre Deulofeu.
La proclamación de la II República en 1931 también merece un capítulo aparte en la muestra, al igual que la generación cultural que surgió entre 1919 y 1936. Dalí, Deulofeu, Carles Fages de Climent y Ramon Reig son algunos de los nombres que ocupan un lugar destacado. También pueden verse dos cuadros del propio Dalí: se trata de los retratos de Puig Pujades y el político Jaume Miravitlles vestido de futbolista. El recorrido por la exposición termina en una cámara oscura que simboliza, como su título indica, "la ruptura violenta de una época brillante". Un vídeo con imágenes de los bombardeos de la aviación franquista, los centenares de víctimas, los edificios destruidos y las huellas de casi medio millón de personas cruzando la ciudad en dirección a la frontera con Francia forman el paisaje de una guerra que terminó con la época dorada de Figueres y todo un país.
Consultas interactivas
"Figueres 1900-1936. Imatge i història de la Catalunya republicana" está considerada como la exposición más ambiciosa que se ha programado jamás en el Museu de l'Empordà. Aparte del valor histórico de la mayoría del material y del rigor de su discurso, la muestra permite a los visitantes consultar los nombres y los oficios de la población activa laboral y fiscalmente que había en la ciudad entre 1894 y 1936. La consulta se puede realizar a través de una base de datos interactiva que se ha instalado en el inicio del recorrido. La exposición, que estará abierta durante cuatro meses, tendrá su propio catálogo de 260 páginas con artículos de historiadores locales.
Una exposición del Museu de l'Empordà ilustra los años de esplendor que vivió la ciudad durante la República
(CARLES ARBOLI - La Vanguardia 12/12/1999)
Girona. Figueres también tuvo su época dorada. Fue entre 1900 y 1936 cuando la ciudad se transformó y vivió su apogeo cultural, económico, urbanístico y social en sintonía con lo que ocurría en la mayor parte de Cataluña. Una época de predominio republicano que se truncó con el estallido de la Guerra Civil y hundió el país en una larga dictadura militar. Significó el fin de la época más brillante de la historia contemporánea de España.
Este relato es el hilo conductor de la exposición "Figueres 1900-1936. Imatge i història de la Catalunya republicana" que desde ayer se puede visitar en el Museu de l'Empordà. El historiador Jaume Santaló se ha pasado el último año trabajando en esta muestra, que presenta y analiza la trayectoria social, económica, urbanística y cultural de Figueres durante este periodo.
Fotografías, documentos, mapas, planos, grabaciones y obras de arte componen el contenido de la exposición, que presenta algún material inédito, como una filmación de la inauguración del monumento a Narcís Monturiol en 1918. La mayor parte del material, repartido en paneles con los colores rojo, amarillo y violeta de la bandera republicana, procede de los principales archivos históricos de Cataluña y algunos particulares, además de obras de la Fundació Gala-Salvador Dalí, el Museu Nacional d'Art de Catalunya o el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.
La visita cronológica a la exposición constata según Santaló, su comisario, "el predominio incuestionable en la sociedad figuerense del republicanismo federalista y catalanista" que, junto a otros factores socioeconómicos, "convirtieron la Figueres de la época en una ciudad de gran dinamismo". Unos años durante los que bajo el mandato del alcalde Marià Pujulà y su inspirador e ideólogo republicano Josep Puig Pujades se reformó la Rambla, se construyó el Parc-Bosc y se sentaron las bases para el posterior crecimiento urbanístico. Unas actuaciones dirigidas en todo momento por el arquitecto Ricard Giralt.
Sin embargo, en 1923 ocurrió algo que paralizó momentáneamente la normalidad republicana. Fue el golpe militar de Primo de Rivera que significó una regresión en la dinámica que se inició a principios de siglo. Esta etapa coincide con un apogeo del activismo cultural para combatir la militarización de la vida política y luchar contra la censura. En 1926 se crea Foment de la Sardana y dos años más tarde nace Atenea, cuyo documento de constitución se puede ver en la exposición con las firmas, entre otros, de Salvador Dalí o Alexandre Deulofeu.
La proclamación de la II República en 1931 también merece un capítulo aparte en la muestra, al igual que la generación cultural que surgió entre 1919 y 1936. Dalí, Deulofeu, Carles Fages de Climent y Ramon Reig son algunos de los nombres que ocupan un lugar destacado. También pueden verse dos cuadros del propio Dalí: se trata de los retratos de Puig Pujades y el político Jaume Miravitlles vestido de futbolista. El recorrido por la exposición termina en una cámara oscura que simboliza, como su título indica, "la ruptura violenta de una época brillante". Un vídeo con imágenes de los bombardeos de la aviación franquista, los centenares de víctimas, los edificios destruidos y las huellas de casi medio millón de personas cruzando la ciudad en dirección a la frontera con Francia forman el paisaje de una guerra que terminó con la época dorada de Figueres y todo un país.
Consultas interactivas
"Figueres 1900-1936. Imatge i història de la Catalunya republicana" está considerada como la exposición más ambiciosa que se ha programado jamás en el Museu de l'Empordà. Aparte del valor histórico de la mayoría del material y del rigor de su discurso, la muestra permite a los visitantes consultar los nombres y los oficios de la población activa laboral y fiscalmente que había en la ciudad entre 1894 y 1936. La consulta se puede realizar a través de una base de datos interactiva que se ha instalado en el inicio del recorrido. La exposición, que estará abierta durante cuatro meses, tendrá su propio catálogo de 260 páginas con artículos de historiadores locales.