UN LUGAR, UN ARTISTA
FIGUERES Y CARLES FAGES DE CLIMENT
Entre el humor y la marginación
JOAQUIM ROGLAN - La Vanguardia, 14/03/2008
En Figueres y en Castelló d´Empúries sigue viva la memoria del poeta más popular del Empordà y más marginado de la literatura catalana
JOAQUIM ROGLAN - Figueres
En la calle Monturiol de Figueres hay unos versos que recuerdan: "Al carrer de Monturiol / l´inventor del submarí,/ jo i en Salvador Dalí/ - tres genis- hem vist el sol". Los escribió Carles Fages de Climent, que vio la luz el 16 de mayo de 1902 frente a alguno de los balcones del enorme caserón familiar que da a las calles Enginyers y Monturiol. El poeta viviría lo suficiente para leer su propia muerte y tomársela a broma cuando un diario la anunció días antes por error. Hasta que se murió de verdad en el hospital de Figueres el 1 de octubre de 1968. "Después de recibir los Santos Sacramentos, porque no abandonó su fe ni durante sus desvaríos, el poeta se hizo poner un disco con el Requiem de Fauré y expiró durante la audición el mismo día que en París también dejó de existir su gran amigo Marcel Duchamp", recordó el pintor Joan Josep Tharrats. Y Salvador Dalí declaró: "Cuando se conozca la obra de Fages de Climent, se verá que ha tratado los problemas universales a través de lo ultralocal y provincial, que es nuestro maravilloso Empordà. En la iconografía y en la etnología ampurdanesa será una de las figuras más grandes que hemos tenido".
La última visión de Fages de Climent que tuvo el catedrático de Literatura Joan Ferrerós fue en la Rambla. "Estaba plantado en el cruce que hay frente la librería Canet - donde iba a tertulias- y el café Royal, donde escribía algunos epigramas en servilletas que dejaba olvidadas y en el mármol de las mesas", recuerda. La librería y el café siguen en su sitio, casi igual como fueron. La librería conectaba por detrás con un herbolario y todo tenía cierto aire liberal y clandestino durante la dictadura. El Royal conserva sus azulejos modernistas, pero no su club de ajedrez.
También la Sala Edison, o Can Cusí, fantástico cine modernista que los sucesivos ayuntamientos han dejado arruinar, está a punto de desaparecer bajo una obra nueva. Como pasó con Can Mero, otro bar que frecuentaba Fages y que regentaban Baldomero padre y Baldomero hijo, que era pianista, y donde ahora hay una agencia de viajes. Cerca estaba la pensión donde Josep Pla se citaba con Consuelo de Cadaqués.
Tampoco está en el mapa urbano la fonda Can Roca, cuyo propietario, Josep Martí, acogió a Fages de Climent cuando se había arruinado y separado de su mujer y de su familia. "En una pizarra de la fonda se anotaban los resultados del Tour de Francia cuando aún no había televisión y allí se hospedaban algunos pintores que pagaban con cuadros", cuenta Ferrerós.
Junto a la casa natal de Fages de Climent tampoco existe ya la tienda de antigüedades que regentaba su amiga, la escritora Montserrat Vayreda. "Más que vender, charlaba con Fages y escribía", evoca Ferrerós. Ahora hay allí una tienda de ropa interior femenina. Cerca está otra tienda de moda con un pareado de Vayreda que dice: "La roba no es fa mai vella si es de Fages de Gironella". Y es que en Figueres todos los caminos llevan a su poeta. Del Casino menestral donde se celebraban los juegos florales sólo queda la fachada. Allí leyó Fages una ucronía sobre Vilasacra, localidad cercana a Castelló d´Empúries. "Según aquel texto, Vilasacra era la capital del mundo, porque Pere el Catòlic venció en la batalla de Muret, se consolidó el poder del imperio catalán en Occitania, y Vilasacra sería ahora la capital de la primera potencia mundial. Entre los ministros y secretarios de Estado figuraban los amigos de Fages de Climent, y las escuelas de latín y de griego estaban abiertas día y noche. Pero es un libro que sólo pueden entender los ampurdaneses", advierte.
No debió de entenderlo Joan Triadú, quien no incluyó a Fages en su Antologia de la poesia catalana,porque lo consideraba un españolista y no un hombre como entonces Dios mandaba. De ahí que Fages le dedicase el epigrama que dice: "Aquest pobre Triadú, que per triar no té do, si quan tria, tria dur, és que és un mal triador". También le olvidaron Josep Maria Castellet y Joaquim Molas en su Antología general de la poesía catalana,porque le consideraban de derechas. Lo cierto es que al final de sus días, sólo le avalaban Eugeni d´Ors y Rafael Sánchez Mazas, el poeta de Soldados de Salamina que rompió con el franquismo, veraneaba en el Empordà y calificó a Fages como "el mejor poeta catalán de este tiempo, en quien bajo muchos aspectos pervive el alma romántica de Dante o Jacopone de Todi". Según Joan Ferrerós y Rafael Pascuet, impulsores del homenaje a Fages con motivo de su centenario, "a Fages le pasó lo que a otros miembros de su generación, como Josep Pla, Salvador Dalí o Carles Sentís, que unos les consideraban rojos separatistas y otros, españolistas traidores a la literatura y a la resistencia de domingo en piso clandestino".
Más allá del romanticismo y de la política, ahora se remodela en Figueres el edificio de La Torre Vasca, desaparecida casa transversal de señoritas donde Dalí y Fages iban más a ver y a comentar que a hacer. Tratándose de libros, finalmente a Carles Fages de Climent le pasó lo más bonito que le puede pasar a un escritor. Y es que Figueres le dedicó una biblioteca municipal que lleva su nombre. Otra cosa es que el edificio sea uno de los más feos de Figueres y parte del extranjero.
P E R S O N A J E Y A R T I S T A
Un poeta a contracorriente
El personaje ocultó el valor del poeta hasta que la celebración en el 2003 del año Carles Fages de Climent puso las cosas en su sitio al editarse gran parte de su obra. Estaba considerado un poeta maldito, rechazado por los perfeccionistas y por los escritores barceloneses debido a su procacidad y su popularismo localista. Se formó en el noucentisme, sin distanciarse nunca de los postulados de la renaixença.
CREADORES DE MITOS
Además del popular Redolí de la Gala i en Dalí, de la relación entre Fages y Dalí brotaron versos y dibujos que son mitos del Empordà.
Oració al Crist de la Tramontana
Braços en creu, damunt la pia fusta,
Senyor, empareu la closa i el sembrat.
Doneu el verd exacte al nostre prat
i mesureu la tramuntana justa
que eixugui l´herba, i no ens espolsi el blat.
Del somni de Cap de Creus
Tinc un acord de Càrites i Fúries,
la bruixa a Llers, la fada al Canigó
i dones d´aigua - Roses i Montgó-.
Tinc un castell roquís a Quermançó
i tres bordells a Castelló d´Empúries.
Pogués ésser al castell de la Poncella!
Pogués ésser al rocam de Quermançó
o a la Gallarda, closa a Castelló!
Si pots venir un capvespre al Canigó
veuràs el far, de lluny, com una estrella.
Al bell redós de la muntanya il · lustre,
prest esquinça sagetes el collverd
aparellant-se amb el coll-roig, i es perd
en un vol ample, lluminós, incert,
vers la ciutat de Castelló, lacustre
Les bruixes de Llers
La mare em deia que, essent criatura,
va bressolar-me una dona de Llers.
Suau embruix que en mi encara perdura,
em prenc la vida com si fos en vers.
UN SEÑORÍO ALGO FEUDAL
El poeta malgastó parte de su fortuna entre pleitos, deudas, jueces y notarios
El alcalde de Castelló d'Empúries le salvó de los piquetes de la FAI
La casa de la familia Fages estaba y está en Castelló d´Empúries, una de las más hermosas y señoriales poblaciones del Empordà. Su mansión conserva una antigua torre de muralla, conocida como el Portal de la Gallarda, con un puente sobre uno de los canales de riego de los aiguamolls.En su patio hay cinco cipreses y una higuera. Y los establos y caballerizas son ahora un restaurante ubicado en un recinto que respira calma y tranquilidad. El resto del enorme caserón sigue siendo causa de pleitos entre sus deudos, que al parecer heredaron la afición del poeta por gastar gran parte de su fortuna entre abogados y tribunales.
Dice un viejo refrán: "A Castelló, vila major, tot són jutges i notaris". Tal vez por ello, Fages de Climent se pasó la vida pleiteando y siendo perseguido por los acreedores que dejó en toda Catalunya, salvo en Sant Sadurní d´Anoia, donde se casó con una rica pubilla pero su suegro no le dejó tocar ni un céntimo. Con trabajada fama de cantamañanas, fue un dandy en Barcelona que acabó arruinado en Figueres. Pero allí le rodearon siempre varias mujeres que llamó las Cariátides.
Por sus aires señoriales, Josep Pla llamó al poeta cagalló feudal,hecho que no le restó admiración por su obra, ya que le dedicó un estudio de varios cientos de páginas. Entre otros negocios fracasados, como una editorial y una empresa cinematográfica, Fages de Climent montó uno de los primeros nigth clubs de la Costa Brava, concretamente en Selva de Mar. Pero entre que siempre invitaba a gente famosa y el lugar cobró mala fama entre el vecindario a causa de las turistas con minifalda, contrajo más deudas todavía. Aquel garito es hoy un bar del que pocos saben su historia.
Pocos saben también que el poeta tuvo que huir de los piquetes de la FAI y le salvó la vida el alcalde republicano de Castelló d´Empúries. Otros vecinos corrieron peor suerte y fueron asesinados - más de doce- en plena fiesta mayor, por lo que durante muchos años se cambió la fecha de la fiesta. También un cura pariente suyo fue asesinado cerca de Figueres. Otra faceta poco conocida son los reportajes que escribió para La Vanguardia,donde dio a conocer las canteras del Empordà y otros aspectos muy interesantes y endiabladamente bien escritos. Pero su espléndida obra literaria quedó sepultada bajo su personaje y sus anécdotas. Sus restos yacen en el panteón familiar de Castelló d´Empuries. Y las brujas de Llers aún llevan duelo.
FIGUERES Y CARLES FAGES DE CLIMENT
Entre el humor y la marginación
JOAQUIM ROGLAN - La Vanguardia, 14/03/2008
En Figueres y en Castelló d´Empúries sigue viva la memoria del poeta más popular del Empordà y más marginado de la literatura catalana
JOAQUIM ROGLAN - Figueres
En la calle Monturiol de Figueres hay unos versos que recuerdan: "Al carrer de Monturiol / l´inventor del submarí,/ jo i en Salvador Dalí/ - tres genis- hem vist el sol". Los escribió Carles Fages de Climent, que vio la luz el 16 de mayo de 1902 frente a alguno de los balcones del enorme caserón familiar que da a las calles Enginyers y Monturiol. El poeta viviría lo suficiente para leer su propia muerte y tomársela a broma cuando un diario la anunció días antes por error. Hasta que se murió de verdad en el hospital de Figueres el 1 de octubre de 1968. "Después de recibir los Santos Sacramentos, porque no abandonó su fe ni durante sus desvaríos, el poeta se hizo poner un disco con el Requiem de Fauré y expiró durante la audición el mismo día que en París también dejó de existir su gran amigo Marcel Duchamp", recordó el pintor Joan Josep Tharrats. Y Salvador Dalí declaró: "Cuando se conozca la obra de Fages de Climent, se verá que ha tratado los problemas universales a través de lo ultralocal y provincial, que es nuestro maravilloso Empordà. En la iconografía y en la etnología ampurdanesa será una de las figuras más grandes que hemos tenido".
La última visión de Fages de Climent que tuvo el catedrático de Literatura Joan Ferrerós fue en la Rambla. "Estaba plantado en el cruce que hay frente la librería Canet - donde iba a tertulias- y el café Royal, donde escribía algunos epigramas en servilletas que dejaba olvidadas y en el mármol de las mesas", recuerda. La librería y el café siguen en su sitio, casi igual como fueron. La librería conectaba por detrás con un herbolario y todo tenía cierto aire liberal y clandestino durante la dictadura. El Royal conserva sus azulejos modernistas, pero no su club de ajedrez.
También la Sala Edison, o Can Cusí, fantástico cine modernista que los sucesivos ayuntamientos han dejado arruinar, está a punto de desaparecer bajo una obra nueva. Como pasó con Can Mero, otro bar que frecuentaba Fages y que regentaban Baldomero padre y Baldomero hijo, que era pianista, y donde ahora hay una agencia de viajes. Cerca estaba la pensión donde Josep Pla se citaba con Consuelo de Cadaqués.
Tampoco está en el mapa urbano la fonda Can Roca, cuyo propietario, Josep Martí, acogió a Fages de Climent cuando se había arruinado y separado de su mujer y de su familia. "En una pizarra de la fonda se anotaban los resultados del Tour de Francia cuando aún no había televisión y allí se hospedaban algunos pintores que pagaban con cuadros", cuenta Ferrerós.
Junto a la casa natal de Fages de Climent tampoco existe ya la tienda de antigüedades que regentaba su amiga, la escritora Montserrat Vayreda. "Más que vender, charlaba con Fages y escribía", evoca Ferrerós. Ahora hay allí una tienda de ropa interior femenina. Cerca está otra tienda de moda con un pareado de Vayreda que dice: "La roba no es fa mai vella si es de Fages de Gironella". Y es que en Figueres todos los caminos llevan a su poeta. Del Casino menestral donde se celebraban los juegos florales sólo queda la fachada. Allí leyó Fages una ucronía sobre Vilasacra, localidad cercana a Castelló d´Empúries. "Según aquel texto, Vilasacra era la capital del mundo, porque Pere el Catòlic venció en la batalla de Muret, se consolidó el poder del imperio catalán en Occitania, y Vilasacra sería ahora la capital de la primera potencia mundial. Entre los ministros y secretarios de Estado figuraban los amigos de Fages de Climent, y las escuelas de latín y de griego estaban abiertas día y noche. Pero es un libro que sólo pueden entender los ampurdaneses", advierte.
No debió de entenderlo Joan Triadú, quien no incluyó a Fages en su Antologia de la poesia catalana,porque lo consideraba un españolista y no un hombre como entonces Dios mandaba. De ahí que Fages le dedicase el epigrama que dice: "Aquest pobre Triadú, que per triar no té do, si quan tria, tria dur, és que és un mal triador". También le olvidaron Josep Maria Castellet y Joaquim Molas en su Antología general de la poesía catalana,porque le consideraban de derechas. Lo cierto es que al final de sus días, sólo le avalaban Eugeni d´Ors y Rafael Sánchez Mazas, el poeta de Soldados de Salamina que rompió con el franquismo, veraneaba en el Empordà y calificó a Fages como "el mejor poeta catalán de este tiempo, en quien bajo muchos aspectos pervive el alma romántica de Dante o Jacopone de Todi". Según Joan Ferrerós y Rafael Pascuet, impulsores del homenaje a Fages con motivo de su centenario, "a Fages le pasó lo que a otros miembros de su generación, como Josep Pla, Salvador Dalí o Carles Sentís, que unos les consideraban rojos separatistas y otros, españolistas traidores a la literatura y a la resistencia de domingo en piso clandestino".
Más allá del romanticismo y de la política, ahora se remodela en Figueres el edificio de La Torre Vasca, desaparecida casa transversal de señoritas donde Dalí y Fages iban más a ver y a comentar que a hacer. Tratándose de libros, finalmente a Carles Fages de Climent le pasó lo más bonito que le puede pasar a un escritor. Y es que Figueres le dedicó una biblioteca municipal que lleva su nombre. Otra cosa es que el edificio sea uno de los más feos de Figueres y parte del extranjero.
P E R S O N A J E Y A R T I S T A
Un poeta a contracorriente
El personaje ocultó el valor del poeta hasta que la celebración en el 2003 del año Carles Fages de Climent puso las cosas en su sitio al editarse gran parte de su obra. Estaba considerado un poeta maldito, rechazado por los perfeccionistas y por los escritores barceloneses debido a su procacidad y su popularismo localista. Se formó en el noucentisme, sin distanciarse nunca de los postulados de la renaixença.
CREADORES DE MITOS
Además del popular Redolí de la Gala i en Dalí, de la relación entre Fages y Dalí brotaron versos y dibujos que son mitos del Empordà.
Oració al Crist de la Tramontana
Braços en creu, damunt la pia fusta,
Senyor, empareu la closa i el sembrat.
Doneu el verd exacte al nostre prat
i mesureu la tramuntana justa
que eixugui l´herba, i no ens espolsi el blat.
Del somni de Cap de Creus
Tinc un acord de Càrites i Fúries,
la bruixa a Llers, la fada al Canigó
i dones d´aigua - Roses i Montgó-.
Tinc un castell roquís a Quermançó
i tres bordells a Castelló d´Empúries.
Pogués ésser al castell de la Poncella!
Pogués ésser al rocam de Quermançó
o a la Gallarda, closa a Castelló!
Si pots venir un capvespre al Canigó
veuràs el far, de lluny, com una estrella.
Al bell redós de la muntanya il · lustre,
prest esquinça sagetes el collverd
aparellant-se amb el coll-roig, i es perd
en un vol ample, lluminós, incert,
vers la ciutat de Castelló, lacustre
Les bruixes de Llers
La mare em deia que, essent criatura,
va bressolar-me una dona de Llers.
Suau embruix que en mi encara perdura,
em prenc la vida com si fos en vers.
UN SEÑORÍO ALGO FEUDAL
El poeta malgastó parte de su fortuna entre pleitos, deudas, jueces y notarios
El alcalde de Castelló d'Empúries le salvó de los piquetes de la FAI
La casa de la familia Fages estaba y está en Castelló d´Empúries, una de las más hermosas y señoriales poblaciones del Empordà. Su mansión conserva una antigua torre de muralla, conocida como el Portal de la Gallarda, con un puente sobre uno de los canales de riego de los aiguamolls.En su patio hay cinco cipreses y una higuera. Y los establos y caballerizas son ahora un restaurante ubicado en un recinto que respira calma y tranquilidad. El resto del enorme caserón sigue siendo causa de pleitos entre sus deudos, que al parecer heredaron la afición del poeta por gastar gran parte de su fortuna entre abogados y tribunales.
Dice un viejo refrán: "A Castelló, vila major, tot són jutges i notaris". Tal vez por ello, Fages de Climent se pasó la vida pleiteando y siendo perseguido por los acreedores que dejó en toda Catalunya, salvo en Sant Sadurní d´Anoia, donde se casó con una rica pubilla pero su suegro no le dejó tocar ni un céntimo. Con trabajada fama de cantamañanas, fue un dandy en Barcelona que acabó arruinado en Figueres. Pero allí le rodearon siempre varias mujeres que llamó las Cariátides.
Por sus aires señoriales, Josep Pla llamó al poeta cagalló feudal,hecho que no le restó admiración por su obra, ya que le dedicó un estudio de varios cientos de páginas. Entre otros negocios fracasados, como una editorial y una empresa cinematográfica, Fages de Climent montó uno de los primeros nigth clubs de la Costa Brava, concretamente en Selva de Mar. Pero entre que siempre invitaba a gente famosa y el lugar cobró mala fama entre el vecindario a causa de las turistas con minifalda, contrajo más deudas todavía. Aquel garito es hoy un bar del que pocos saben su historia.
Pocos saben también que el poeta tuvo que huir de los piquetes de la FAI y le salvó la vida el alcalde republicano de Castelló d´Empúries. Otros vecinos corrieron peor suerte y fueron asesinados - más de doce- en plena fiesta mayor, por lo que durante muchos años se cambió la fecha de la fiesta. También un cura pariente suyo fue asesinado cerca de Figueres. Otra faceta poco conocida son los reportajes que escribió para La Vanguardia,donde dio a conocer las canteras del Empordà y otros aspectos muy interesantes y endiabladamente bien escritos. Pero su espléndida obra literaria quedó sepultada bajo su personaje y sus anécdotas. Sus restos yacen en el panteón familiar de Castelló d´Empuries. Y las brujas de Llers aún llevan duelo.